Los tatuajes se han vuelto particularmente populares en los últimos años. Sin embargo, mientras que muchas personas quieren obtenerlos, también quieren deshacerse de ellos. Los tatuajes se crean inyectando pigmentos de colores en pequeños orificios que se hacen en la piel.
Los resultados son más o menos permanentes, independientemente de si el pigmento ha sido inyectado por un tatuador profesional o un aficionado. Muchos de nosotros llegamos a la conclusión de que el tatuaje que pensábamos que sería perfecto para siempre es ahora una responsabilidad, ya sea por razones profesionales o sociales. Ahora hay una solución para la mayoría de los tatuajes dependiendo del color y de cómo se aplicó el tatuaje por primera vez.
La eliminación de tatuajes con láser se considera actualmente el mejor método para eliminar tatuajes no deseados. Los pulsos de luz de un láser se dirigen al tatuaje para romper el pigmento. Durante las semanas posteriores a cada tratamiento, los macrófagos en el cuerpo eliminan los pigmentos que han sido destruidos. Generalmente, varios tratamientos son necesarios para deshacerse de todo el tatuaje, lo que significa que el proceso podría requerir muchos meses.
El protocolo de tratamiento y los resultados que usted puede esperar se explican durante la consulta inicial en la clínica estética con uno de los especialistas que sopesará los pros y contras de esta tecnología y las posibles complicaciones.